Pensares… Pesares…

Comienzan a acumularse en la superficie del planeta los cuerpos de amantes anónimos

Cuerpos con rostros anodinos y miembros despedazados tal amasijo de hierros esperando ser reciclados… Esos los más afortunados

Otros son reubicados en chatarrerías clandestinas dándoles salida en mercados ilegales de segunda mano… Cual gangas en las rebajas de un tiempo pasado

 

Cadáveres sentados frente a televisores, ordenadores, teléfonos móviles o tabletas son descubiertos a diario… Solos… Abandonados

Sin nadie que reclame sus cuerpos, que los de sepultura cristiana o atea, sin más camarada de un mando a distancia clavado en los dedos de sus manos

 

Instrumentos complementarios de instantes de asueto, reconvertidos en bienes de primera necesidad reafirmados como centro de nuestro universo

Entremezclados poco a poco con las rutinas, el ocio agotador y el aburrimiento desesperado, han sido capaces de ser los putos amos.

Desengaños amorosos, infidelidades, celos y chats de pareja son los instrumentos utilizados por los nuevos genios.

 

¿¿A dónde hemos llegado??

¿¿Dónde ha quedado lo que una vez fuimos??

¿¿En qué coño nos hemos convertido??

… Somos esclavos de lo que hemos creado

Encadenados de por vida al ocio abusivo… Al aburrimiento infinito

 

¡¡El mayor éxtasis de todos está muerto!!

Lo hemos matado, sin querer o queriendo… Lo mismo da

… Ni lo recordamos ya

 

 

Devoramos webs de contactos en búsquedas de la perfección, del galante príncipe o la dama del bosque encantado. Creamos nuestras propias historias en máquinas de tres al cuarto. La ficción ha vencido a la realidad del deseo… ¿¿Qué hemos hecho??

¿¿Dónde han quedado esos bares en los que nos tomábamos unas birras con los amigos, invitábamos a unas copas a unas chicas desconocidas y se nos desmembraba el cuerpo bailando a ritmo frenético??

 

¿¿Dónde quedó el libre albedrío??

 

Solo somos juguetes rotos en manos desalmadas

No sentimos… No padecemos

Nos unen por programas estadísticos obsoletos

Por preferencias inventadas basadas en encuestas baratas

¿¿Cómo nos hemos dejado llevar a este punto??

¿¿Por qué nos hemos vuelto…??

Solo por la comodidad de no buscar

Por el miedo a la negación

Por la necesidad de no fallar

Por la obligatoriedad de ser uno más…

Sin elección…  Sin decisión…

¿¿Qué podemos esperar ser??

 

Dónde están las noches sin dormir

Los días sin noches

La música, el placer, el deseo…

 

¿¿Dónde se ha escondido el sexo??

El éxtasis alcanzado ese momento álgido

El frenesí de dos cuerpos entrelazados… Sudorosos y húmedos

Cuerpos abrasados del calor producido en el cóncavo entre ambos

Las caricias de las manos resbalando por las siluetas contrarias

Los dedos investigando oscuros túneles prohibidos a los ajenos

Los susurros y palabras obscenas que servían de precalentamiento

Los besos voraces y las lenguas sagaces que desvirgaban espacios reservados

Pero…

¿¿Dónde está el orgasmo??

El sumun ansiado de cualquier pareja

La culminación final de un buen polvo

 

¿¿Acaso lo cotidiano nos ha dormido??

¿¿El aburrimiento nos ha vencido??

¿¿Tan predecibles e inocentes nos hemos vuelto??

Vidas monótonas… Sexo casero

Una película… Una foto…

Dónde se esconde la pasión

Dónde quedó el deseo

No hay lugar para la excitación preliminar

Los juegos de manos y preámbulos intempestivos

Dónde quedó la imaginación

La necesidad de probar lo prohibido

La sensación de querer lo ajeno

Las ganas del polvo mañanero

Las noches de lujuria desenfrenada

Dónde…

 

Vidas ancladas en sofás verdes de terciopelo… Ni en eso tenemos gracia

Películas con palomitas como las de Charles Chaplin… Mudas

Sin color… Sin…

… ¡¡Aburridas!!… De todo las faltaba

 

 

Lo excitante se ha convertido con el tiempo y por la desgana rutina malsana

Ya no comparten cama, solo casa y comida

Mientras se preguntan en voz baja

 

“¿Tan secos son mis besos?

¿Tan bruscas mis caricias?

¿Tan inapetente te resulta ya el sexo en vivo?”

“O has encontrado a otro con el que se hace más tranquilo

Menos excitante… ¡¡Más aburrido!!

…No hablas??

…No te explicas??

¿¿Solo callas??”

 

¿¿Como máquinas acabaremos nuestros días??

… Preguntaba mientras sentado observaba el cuerpo tumbado descuartizado sobre la alfombra de la alcoba

Una pregunta resonaba en su cabeza…

¿¿Cubriría el seguro la reparación de la muñeca??

¿¿Estaría en garantía??

 

Ni lágrimas… Ni pesares… Ni pensares

Solo dolor en la cartera

 

Los sentimientos han desaparecido

Nos hemos vuelto a las cavernas

 

O.