
Odisea con una esencia
Que ni los más intrépidos
Lograron conquistarla.
Arboledas de cemento armado
Frescos de calaveras cinceladas
Cuerpos adosados al pórtico
Sin alma ni gloria
Cúmulo de desvencijados retales
De todos aquellos
Que durante años se acercaron creyendo…
Plagas en charcas
Sapos y ranas caníbales
A ras del paso.
Sobrepasando su dominio
Caimanes y cocodrilos
De inmediato
Voraces hienas acosando.
Arenas movedizas implacables
Para quien llegase.
Degustándote sin prisa
Relamiendo el manjar
Degustando al comensal
Ciego e incauto.
Una verde pradera…
Teñida de amapolas
De cerca gotas rojizas
De cuerpos desmenuzados
Un campo de batalla
El afortunado
Se ha encontrado
Minas, misiles y metralla
Con el botín que aún sobrevive
Juegan a los dados.
Quién te acompaña
En semejante locura
Capaz de echar una mano??
… Ni el propio Ulises
Se vería capacitado.
Ni un corsario tullido
Con toda su avaricia pecuniaria
Ni Aníbal el conquistador
Con todo su ejército arrollador
Ni Napoleón, ni Hitler, Stalin…
Ambiciosos ególatras
Genocidas psicópatas
Sin sensibilidad humana
Ni empatía… Solo hambre posesiva.
Ni la imperial Roma
Que cautivó el mundo
Incluso se le quedó escueto.
Fueron sometidos por su propio ego
Llegado el momento preciso
Incapaces de descender de su altar
Llamar a una simple puerta y preguntar.
Quizás…
Un esquizofrénico trotamundos
Con una saca de sentimientos a cuestas
De andanzas y una flauta desafinada
Sin más esfuerzo que su empeño
La bendición de su locura
Completamente solo
Salvo el corazón
Como única compañía
Canturrea palpitando
Acompasando la sinfonía
Dando algo de ritmo sano a la ironía
De esta esperpéntica odisea.
Sea capaz de llamar al timbre
Esperar tumbado con lluvia o soleado
Esperando por el intempestivo arribo
Por su falta de raciocinio.
Será el afortunado??
El que consiga su vaso de agua
Con el que deletrear su nombre
Hablar con la muchacha
Hasta que llegue la noche
Le invite a su cama
Desplieguen sus sentires
Desbocando la pasión
Trasvasando la fricción…
O serán dos cuerpos extraños
Sin conexión ni consenso…
Otra fórmula matemática de imposible solución…
O.

