No hay romanticismo
en el abismo del odio
solo sacrificio de “mediocres”
satisfaciendo la vanidad
de unos “privilegiados”.
Un paraíso terrestre
amanece saciado
de almas aún calientes
merodeando sobre
cuerpos vacíos
yacen refrigerados
por lagrimales sanguíneos.
Un hombre… Un alma.
No sobresalen credenciales
un sumatorio de donantes de sangre.
Escenas maquiavélicas
de una tragedia evitable.
En las trincheras
agazapados como conejos
atenazados por el miedo
capoteando en polvo y sudor
gemidos y suspiros
de sed y hambre
exhalan terror al aire
inhalando pánico incontrolable.
Espacio fronterizo
que separa ambos bandos
trincheras que sirven de fosas
y parapetos a partes iguales.
Atmósfera podrida
contaminada por heces
y vómitos impersonales.
Miradas extraviadas
dientes musicales.
Quién quiere enfrentarse de cara
… A oscuras sería más fácil
evitando pesadillas
y detalles particulares.
En un instante…
La tormenta amaina
silencio hace eco
dejando tranquilidad
en el atosigante paraje.
Ya…
Únicamente un macabro cuadro
decora el antaño elegante oasis.
O.


Thanks for sharing this idea. Let’s follow our blogs. Anita
Me gustaMe gusta