Como…

Jaquecas lujuriosas me invaden
tras la pasión desbocada
en un instante de mutuo delirio.

Si por un coito nocturno,
la mente genera ilusiones
ensoñaciones, excentricidades y demás desvaríos mentales
por haberme poseído
por haberte poseído.

No veo ángeles desfilando
ni oigo trompetas atronadoras
no siento las danzarinas mariposas
ni veo luciérnagas coloreando el techo
mientras permanecemos observando…

Siento que desvanezco
al igual que el náufrago en su destino
esperando un obsequio…

Con la esperanza vital
de una simple mirada
y una sincera sonrisa.
por la creencia
de que no solo ha sido un clímax esporádico
por fé de haber casado un enamoramiento a largo plazo.

O.

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