Socarrón y sombrío
Devastador «amigo«
Imán atrapa almas
Depredador sentimental
Flautista de los sentidos.
En tu paraguas acumulas
El botín sisado a amantes
Que «proteges»
Los delirios de su amor
Bajo el cóncavo de tu sigilo.
Dime por qué espías
Con quién tienes contrato
Para continuar en tu poltrona
Quién es el receptor
De lo que debería resguardar tu escudo
Lo corrompes vendiéndoselo sin escrúpulos.
¿Quién diseñó la trama?
Obligándote a chivar y encarcalar
Cualquier indicio sensitivo
Mientras los pares se creían a salvo
En ese remanso de sosiego idílico.
Quién chantajea tus ramas
Tu tronco y tus raíces
Oscureciendo tu savia amortiguante
Tus alas embolventes
Q cual cruzado el protectorado era tu credo.
Carcajadas maquiavélicas
Resuenan en el espesor nocturo
Viene a someterte son sacándote
El sumatorio diario acordado.
Lloras por dentro
Traicionando tu juramento
A expensas del sufrimiento
De aquellos a los que creyeron
Que debajo tuyo
El diablo no organizaría complot alguno.
Instantes clandestinos
Susurros y elucubraciones
Silencios y miradas
Caminos de esperanzas.
Gotas ocres de la fuente
Que te refrigeraba en el estío
Bancos solitarios carcomidos
Un verde paisaje desvencijado
Un hervidero de lombrices y gusanos
… Un derruido paraíso.
Únicamente dos viajeros
Que se enamoraron bajo tu sombra
Continúan volviendo por apego sentimental.
Tal vez…
Por los recuerdos acumulados
Tal vez…
Por ser donde se enfrentaron sus ojos
Sus cuerpos se abrazaron
Sus manos se sostuvieron
… Un tierno beso selló su primer encuentro.
O.


Deja un comentario