
Pesadilla entrometida
En la deriva de la noche
Cuando los sueños
Hacen acopio de fuerzas
Distribuyes tu inquietud
Imposibilitando que
La tranquilidad repose.
No das tregua
De día pedaleas por mi consciente
De madrugada embriagas mi subconsciente
Deberían obsequiarte con cuatro paredes blancas
Acolchadas y perennes.
Y aún así…
Recibiría tus misivas impotente
Tus sentimientos me obsesionan
Asimilados por los míos
Han construido una sociedad imperecedera.
Entre ambas mentes
Existe un péndulo
Que confirma
Te cruzaste de pasada
En un coche choque
El estruendo fue silencioso
La inseminación fue de golpe.
Desnudaste mis disfraces
Haciéndote eterna dentro.
Fuiste tomando nota
De lo que faltaba
De lo que sobraba
Tras un minucioso chequeo
Te diste cuenta
Que tras una armadura interpuesta
Me sobraban pedradas en la cabeza
Me faltaba tu alma pendenciera.
Había fortaleza
Impetuosidad
Y el alma encadenada
Pero estaban oxidadas.
Había corazón
Postergado en caparazón
Con un latido mudo.
Le faltaba crédito
Estaba desahuciado
No tenía su espejo.
Enfocaste su figura
Acurrucaste tu pasión
El abrazo fue tu presente
Recargando su la batería
Con un suspiro encarnado al oído
Arengó la linealidad del cobrizo
… Picos y praderas
Es su narrativa poética ahora.
O.


Siempre con gusto, gracias O.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muchas gracias Elvira!!
Me gustaLe gusta a 1 persona
Impresionante es tu forma de escribir…
Me gustaLe gusta a 1 persona