Dime… Poema

Alguien…
Ha hecho sucumbir tu cuerpo
A un masaje corporal
Susurrándote al oído
Ha sosegado tu espíritu
Mientras oías tu propio latido
Atronando con cada impulso
In crescendo el sonido.
Ha incendiado tu universo
con sensuales palabras
Mientras sus manos
Revitalizaban tu espalda
Erizando el vello
Mientras recitaba eróticos versos.
Ha tensado tus glúteos
Cuando se acercaban sus yemas
Donde comienza o finiquita la espalda
Sin aposentarlos
Únicamente circunvalándolos
Mientras con sencillos besos
Exhalaba te quiero en la ladera del cuello.
Ha contraído los músculos
De tus piernas
Desempolvando tus gemelos
Creando un clima pasional
Un fuego imposible de apagar
Solo con colocar sus palmas sobre ellos.
Los pies… Te los han degustado
Te los han estremecido
Y liberado del cansancio acumulado
Mientras encorvabas la espalda
Flujo desconcentrabas
Mientras dedo tras dedo
Te estremecías de deseo
Y el tranquilo y sosegado
Te escribía te amo
En la arena del desierto
Acompañándote al vergel
Para refrescar tu cuerpo
Y…

O.