Sus…

¿Dónde estás?

Esa melodía cadenciosa al caminar
insinuante balanceo… Sugerete y temperamental
atónito y perplejo cuando observo
ese deslizamiento sobre el pavimento

Esos dulces ojos
fieros vigilantes que arropan
que hipnotizan al hablar
sinuosos como enredaderas
penetrando sigilosamente
envolviéndote en una asociativa circunferencia

Esa textura aterciopelada
tez que se encomienda
al sosiego de la contraria
efigie placentera
donde perderse y encontrarse
en calma imperecedera.

Esos labios atrayentes imanes
sosegando la premura
apaciguando el preludio
acometiendo el trance
coordinando el guion
de un posible desenlace…

… ¿Cómo encontrarla
si su puerta es un crucigrama?

O.

Deja un comentario

Crea una web o blog en WordPress.com

Subir ↑