Llaman…

extraño

Una atronadora llamada

A altas horas de la madrugada

Una intempestiva visita

Mi puerta cede a la llegada

Deja paso a quien espera

Como un resorte abre

Mi intuición se alarma

Nadie entra

Solo la oscuridad pasa

Como si esperase una mala noticia

Una visita no deseada

Momento inoportuno

Dentro… Tranquilidad y calma

Sosiego pasajero

Fuera…

Mi subconsciente lo intuye

Alerta

Un ligero murmullo se delata

Llegada inesperada

Llamada insensible

Sensación extraña

… Por conocida

Aún más intranquilidad desata

Áurea familiar

Trae un presentimiento

Resentimiento

Recuerdos y sentimientos de un pasado olvidado

Encerrado… No desea ser molestado

Recuerdos tristes

De latitudes lejanas

De espacios olvidados

De penas y lamentos

Prometió no regresar

Prometió

¿¿Cumplirán su promesa??

En guardia mis sentidos

Inquieto camino

La puerta dejando paso

Con sigilo me acerco

Tras ella oscuridad

Algo ronda… Algo que respeto

Su regreso me atenaza

Intuyendo quién ha llamado

Quién ha llegado

Quién espera afuera el momento

¿¿Está??

¿¿No entra??

¿¿Será que pienso demasiado??

Tal vez no sea

Tal vez me he traicionado esperando

Solo sea el viento que mis recuerdos ha resucitado

Un ruido callado

Sigilo… Escucho

Solo aire, oscuridad y…

¿¿Una premonición??

¿¿Un deseo o un engaño??

Me miento

Preguntándome… Deseando…

¿¿Qué o quién está al otro lado??

“No abras esa puerta

De sobra sabes quién es

Tu corazón seguía esperando

Hubiera sido mejor haber olvidado

Pero te dejó marcada para siempre

Aunque lo hayas intentado

Nunca has podido borrarlo

Creo… Que ni has deseado olvidarle

Sabes muy bien que su sola presencia te descentra… Te embriaga

Solo una mirada suya bastaría para recaer… Volver a las andadas

Si es él…

Si entra…

Volverás a caer

Volverás a cometer los mismos errores

No por viejos olvidados

Ni resarcidos

Únicamente escondidos… Esperando

¿¿Olvidar el pasado??

¿¿Lo que te hizo??

¿¿Cómo lo hizo??

¿¿Lo que te costó sanarlo??

No nos engañemos

No ha cambiado”

Algo en mi interior me advierte

Me recuerda

Me pone en guardia

Algo dentro de mí

Se estremece de solo pensarlo

Maldiciendo este instante

Me paro

… Inquieta

Esperando…

Deseando que se hayan equivocado

“¡¡Te exijo!!

Que no permitas que entre

Que no dejes que pase

¡Te pido!

Que no olvides el pasado

Que te mantengas firme

Te ruego…

Que no abras

Que estés equivocada

Por favor…

No olvides

Recuerda cómo acaba

Sabes…

Cómo empieza

Arrumacos

Caricias

Besos

Juramentos

Promesas

Arrepentimientos…

Sabes…

Que te quiere

No lo niego

También sabes

Que es un maestro en este arte

Que llega

Otea

Encuentra su presa

Y se ensaña

A partir de ahí

Comienza su juego…

Se insinúa

Te sigue y te persigue

Hasta que te hace suya

Te seduce y te conquista

Te posee

Una y otra vez

Hasta que se aburre…

No eres culpable

Es su juego

Lo lleva dentro

Le sale…

Aunque lo intente

No puede redimirse

Es demasiado fuerte

Es una adicción

Ese condenado juego…

¡¡La seducción!!

Una vez que seduce

Ni el sexo le atrae

Ya no encuentra diversión

Se aburre…

Demasiado independiente

Llega

Juega

Gana

Desaparece…

¡¡Otra muesca en su culata!!

No le vas a cambiar

Sabes cómo empieza

Sabes cómo acaba

Sabes quién pierde siempre”

No era el corazón el que hablaba

Sería incapaz de decir semejante perorata

Tampoco mi cabeza

Se mantenía aducida desde su última venida

Ni mi Mente soñadora… Cómo recordaba

Ni mi cuerpo… Ese… El que más lo deseaba

Era mi alma… Aún no sanada

Desde de su última visita

Aún convaleciente

Desde su huida

Aún lloraba…

Era Ella la que de rabia gritaba

“No habrás

Que se quede en el pasado

Sigo convaleciente

Aún no me he recuperado

Aún no tengo fuerzas

Para volver al cuadrilátero…

Abre los ojos,

Atranca la puerta

Quítate la venda

Mira por la mirilla

Dile que no vuelva

Que has cambiado la cerradura

Que tu corazón pertenece a otro

Que es pasado

Que no queda sitio

Que no le deseas

Que ya no significa nada

Que no eres la misma

Ya no eres esa niña

Que has cambiado

Miéntele”

Como siempre sucede

El corazón no hace ni puto caso

Cuanto más le dices menos te escucha

No obedece

Vuelve a caer

En las mismas mentiras

Es esclavo de sus propios sentimientos

Esos que al nacer le fueron otorgados

Abro la puerta temerosa

Entre la necesidad y el miedo

… De que sea cierto

… De que lo que deseo esté al otro lado

… De volver a verlo

… De mirarlo

Abro…

Me desplomo

De golpe caigo

Mi corazón no lo ha soportado

Demasiada tensión para un instante

Se ha parado…

¡Mi madre!

¡Mi hermano!

Se me acercan

Me toman el pulso

No hay latido

Se ha parado

No entienden que me ha pasado

Mientras…

En mi mente un fino destello recuerda…

Abrí…

Entró…

O.

Poesía

14 Comentarios Deja un comentario

  1. Genial! Sabes, me pusiste a pensar que hay que ser justo y equilibrado, que hay ciertas cosas y personas que realmente merecen no ser olvidadas, pero eso si! Ser recordados de una forma que nos haga solo sonreír por la experiencia…el aprendizaje…una gran experiencia que no merece ser olvidada, pero si recordada de la mejor manera, sin dolor, sin causar ningún efecto nocivo en nuestro interior…creo que es un olvido más grande que el olvido 🙂 recordar. ..mantener…pero sin poder… sin existir en ti…

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  2. Tu entrada me recordó a mi, sabes ha pasado tantas cosas y realmente cuando olvido solo recuerdo uno que otro momento corto en mis días y sorrio y agradezco, pero me enfoco en mi presente, ese recuerdo es un recuerdo y se que no vale la pena permanecer recordando, ni volviendo a morir dejando entrar…cuando ya he sanado, me recuerda a mi ex con quien dure 7 años y ahora después de casi otro siete hasta puedo ser su amiga, y casi nunca pienso en eso que fue, escasamente un recuerdo que rara vez se cola pero ya no entra…ya no duele, por fin olvide…aunque recuerde a veces, aunque vuelva a tener esa persona al frente. ..ya existe de ese modo, incluso me he sorprendido porque el verdadero olvido es literalmente la muerte de algo que te hizo sentir dolor, felicidad…, pero que cuando llega esa muerte, literalmente es como si jamás lo hubieras vivido, ya no sientes que lo viviste alguna vez, no sientes que existió! Ese es el verdadero olvido, la muerte de cualquier sentimiento que se sintió por algo vivido….menos el amor verdadero 😉 es si que este siempre!!!! Un abrazo para ti escritor! Jiji disculpa mis comentarios tan extensos, soy algo extrema ja ja ja y cuando comento lo hago…

    Le gusta a 1 persona

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