Lejanía…

 

Espacio métrico a años luz

entre tú y yo.

Tiempo constatado

entre mi fervor

y nuestro fracaso.

 

Tan lejano lo siento

que me miento,

me convence la locura

que es real, no es un sueño.

 

Conciencia amiga

rebate la debacle,

interpuesta en el punto de mira,

Entre yo y mi pesadilla.

 

Una realidad virtual,

en un universo paralelo,

imaginación de altas miras

me domina.

 

Lo nítido, se difumina en mi recuerdo,

transita su silueta entre espacio

y tiempo,

vagabundo del ahora o nunca,

inspiración mental

de expectativas dudosas.

 

Pasando…

 

Decrece la creencia,

la esperanza desespera,

nada cambia,

nada altera la voraz rutina

que disuelve mi cuerpo,

que se atraganta con mi alma.

Tú… Una blasfemia en mi sueño.

 

¿Estás aquí?

Siento una fusión de átomos

a mi lado,

un latido presente

sobre mi pecho,

la respiración,

sensación de anhelo,

de angustia

por estar separados.

 

Tan cercana suspiras

que tiemblo.

Susurras ansiosa,

descabalando sentidos,

desarbolando sentimientos.

 

Temo despertar,

ver qué fue auténtico

… Nada

Solo una quimera

dentro de un placentero sueño.

 

Mi vida pasa.

Corriendo desbarata,

zigzagueando como un alcohólico

por el dolor

que arde de pasión en mi pecho.

 

Tu cuerpo… Tan cerca

que lo temo.

Atosigarte, agobiarte,

que esta difícil imagen

se evapore de nuevo.

 

Que nada sea verdad,

que todo fuera un sueño.

Que únicamente en mi mente

tengas cabida.

Solo allí…, soñando

seamos capaces de soportarnos,

de compartir lo que debiéramos.

 

O.

Poesía